Se trata de una antigua fortaleza medieval (Siglo XVII) de la que tan sólo se distinguen en la orografía y entre la frondosa vegetación, los surcos en estrella que en su día sirvieron de limitación a la posible empalizada en baluarte que protegía a los soldados en su interior. Situada en las inmediaciones de la aldea de Bangueses, debió ser construida para proteger las comunicaciones con la frontera en plena época de las luchas fronterizas del siglo XVII entre España y Portugal.

Según el arqueólogo Eduardo B. Nieto, el fuerte debió estas formado por una plaza cuadrada central, una amplia muralla protectora con sus vértices sobresalientes a modo de baluartes pentagonales y envolviendo a esta, una nueva muralla siguiendo el contorno interior. Finalizadas las relaciones bélicas fronterizas, es muy posible que el conjunto cayera en desuso, siendo definitivamente abandonado por los vecinos y con el paso del tiempo oculto por la vegetación.

Este sería, por lo tanto, el primer punto de referencia en la comarca, por ser la puerta de entrada, tal como se señala en el libro “Caminos portugueses de peregrinación a Santiago de la Xunta de Galicia. 1993”, cuyo trazado nosotros tomamos como referencia al estar en aquel momento avalado por la propia Xunta de Galicia y en el cual se puede leer: “La vía XVIII del Itinerario de Antonino, también llamada vía Bracarense, indica la ruta entre Porteda do Home y Bande. La calzada romana, en uso durante las épocas medieval y moderna, en la actualidad todavía conserva tramos coincidentes con las carreteras de comunicación de los municipios de Lobios, Muíños y Bande”.