En pleno corazón de la Serra do Leboreiro, justo al lado de la línea fronteriza en el páramo conocido como Portela do Pau se encuentra un conjunto dolménico formado por 9 dólmenes o mámoas y 1 menhir, que forma parte de un vastísimo legado neolítico considerado uno de los conjunto más importantes de Europa y, sin lugar a dudas el más numeroso de la Península Ibérica, ya que se encuentran catalogadas bastante más de un centenar de mámoas e incluso hay que asegura que pueden llegar a los dos centenares.

De todas ellas destaca sobremanera, por sus dimensiones y su propia denominación, la “Mota Grande” en el paraje conocido como “Outeiro de Ferro” a unos 1250 metros de altitud. Con unas dimensiones de más de 50 metros de diámetro y una altura de más de 4, según el arqueólogo Eguileta Franco, el monumento es una auténtica excepción por sus dimensiones, tendencia a la forma cónica y su situación extrema en la necrópolis. En los años 90 sufrió una agresión patrimonial que dejó ver durante un tiempo su interior en el que destacan unos dibujos serpentiformes, así como inscripciones en forma de ídolos, de gran interés.